Cenar proteínas de calidad es una de las mejores cosas que puedes hacer por tu cuerpo.
Dormimos… pero el cuerpo no se apaga.
Durante la noche, el organismo se repara, se limpia y se reconstruye.
Y para eso, necesita materia prima, como los aminoácidos presentes en la proteína.
Favorece la recuperación muscular
Especialmente si haces ejercicio: la proteína ayuda a regenerar el tejido muscular mientras duermes.
Te mantiene saciada/o
Evita antojos, hambre a medianoche o picoteos innecesarios.
Estimula el metabolismo
El cuerpo gasta más energía digiriendo proteína que otros macronutrientes.
Sí: digerir también quema.
Regula la glucosa en sangre
Evitar picos nocturnos de insulina mejora tu descanso y tu salud metabólica.
Mejora tu sueño
Aminoácidos como el triptófano favorecen la producción natural de serotonina y melatonina.
El caldo de huesos es ideal para la cena.
No solo es proteína biodisponible, también colágeno, electrolitos, aminoácidos y un digestivo natural.
Si cenas tarde, poco o quieres algo muy reparador: es tu aliado perfecto.
Y ahora que ya conoces los beneficios, ¿qué te parece si te dejo algunas de mis ideas favoritas para cenas nutritivas, fáciles y reconfortantes con caldo de huesos?
Después de leer todo esto, me apetecía dejarte también mi aportación personal como fundadora de SantaPaciencia… como amante del caldito a todas horas y de mi pasión por crear recetas fáciles, nutritivas y llenas de sabor.
Porque sí, incluir proteína en la cena tiene mil beneficios.
Pero si además esa proteína viene en forma de alimento predigerido, fácil de asimilar y lleno de colágeno como nuestro caldo, ¡mejor que mejor!
Aquí van mis 3 cenas rápidas favoritas con caldo de huesos:
Caldo de huesos con huevo: Calienta tu caldo de huesos SantaPaciencia, añade un huevo dentro y déjalo escalfar o remueve para una sopa rápida.
Un poco de sal, AOVE y pimienta… y listo.
Ramen exprés con ternera cruda: Vierte caldo de huesos SantaPaciencia muy caliente sobre tiras finas de ternera cruda (se cocinan con el calor).
Y si te apetece, añade fideos (soba o de arroz) y un poco de cebolleta.
Una cena proteica y muy reconfortante.
Nuestro caldopacho bien fresquito: Nuestra receta estrella del verano.
Como un gazpacho, pero sustituyendo el agua por caldo de huesos y con ingredientes de la mejor calidad.
Sírvelo bien frío y con huevo duro picado y jamón ibérico por encima.
¡Fresco, saciante y lleno de nutrientes!
Espero que estas ideas te inspiren tanto como a mí.
Y si pruebas alguna… ¡cuéntamelo y mándame alguna foto!
Contenido basado en las recomendaciones de la Dra. Martínez Obiols, médica experta en nutrición.
Puedes seguirla en Instagram como [@dra.martinez.obiols].