Según el sitio My Fitness Pal, especializado en alimentación y vida saludable, explica que el pan dulce de la canasta mexicana que hace menos daño -en lo que a ingesta de calorías se refiere-, es el cocol, con menos de 150 calorías.
Contrario a este pan están las donas de chocolate, que pueden tener hasta 250 calorías por porción.
Cuidar la ingesta de pan dulce es importante por varias razones relacionadas con la salud.
Aunque el pan dulce forma parte de la cultura gastronómica de muchos países y puede aportar satisfacción y placer al paladar, su consumo excesivo puede tener efectos negativos en la salud debido a los siguientes factores:
Alto contenido calórico: El pan dulce, al igual que otros productos de repostería, suele tener un alto contenido de azúcares y grasas, lo que se traduce en una densidad calórica elevada.
Azúcares simples: La presencia de azúcares simples en el pan dulce puede provocar picos en los niveles de glucosa en sangre.
Para mantener una dieta equilibrada y cuidar la salud, es recomendable consumir pan dulce y otros productos similares con moderación, priorizando una alimentación rica en frutas, verduras, granos enteros, proteínas magras, y grasas saludables.
También es aconsejable optar por versiones caseras o artesanales de pan dulce, donde se pueda controlar la cantidad y el tipo de ingredientes utilizados, reduciendo el contenido de azúcares y grasas no saludables.