Con el objetivo de suavizar la acidez y aportar un punto de dulzor extra, tenemos varias opciones que podemos usar solas o combinadas: Fruta fresca dulce troceada.
Cuanto más pequeña se trozee más sensación dulce aportará.
Por ejemplo: trocitos de manzana, pera, plátano, pérsimon, mango, uvas, higos, brevas, fresas…Fruta deshidratada o desecada: pasas, trozos de dátiles, de higos secos, de orejones, de ciruelas pasas…Cremas o pastas de fruta o tras pasarla por el microondas.
Por ejemplo: Un plátano maduro triturado, chafado con el tenedor o pasado 1 minuto por el microondasUna manzana o pera trituradas, o cocinadas 5 minutos en el microondasPasas o dátiles hidratados y triturados Pasta de calabaza asada o de boniato asadoCoco deshidratado ralladoCanelaAñadir otros elementos, que aunque no sean dulces, también ayudan a que la acidez del yogur pase más desapercibida: Copos de avena, de centeno, arroz inflado, quinoa inflada (sin azúcar)Frutos secos picados: anacardos, almendras, nueces, avellanas…Cremas de frutos secos (sin azúcar)Semillas o mezclas de semillas: girasol, calabaza, chía, sésamo, lino…
Otra posibilidad, si con todo esto no fuera suficiente, es utilizar un poco de miel cruda.
Pero recuerda que la miel es prácticamente similar al azúcar.Como última opción, tampoco pasa nada si usas un poco de edulcorante mientras te vas acostumbrado a los sabores reales.
Estas dos últimas opciones siempre son mejor que comprar los yogures ya endulzados o edulcorados, porque te permiten decidir a ti la cantidad que quieres añadirles, e ir disminuyéndola de forma progresiva, como vemos en más detalle en el curso de cómo endulzar sin azúcar ni edulcorantes.