El desayuno te ayuda a empezar el día con energía, vitalidad y animado.
Además, desayunar bien te puede ayudar a bajar de peso y a conseguir esa energía extra que necesitas para no dormirte durante tu jornada de trabajo o cuando te pones a hacer deporte.
Hay muchas formas de hacer desayunos fáciles, pero no deberías dejar de lado estos alimentos si vas a entrenar temprano:
El aguacate: es rico en vitaminas, minerales, proteínas, ácidos grasos esenciales y fibra.
La avena: es uno de los mejores cereales que puedes tomar antes de hacer deporte, ya que te aporta energía sin estimular demasiado el organismo.
Los huevos: son una fuente de vitaminas A, B, D, E y minerales como el fósforo, el hierro, el potasio y el magnesio.
Los garbanzos: son ricos en proteínas, carbohidratos y fibra, así como en vitaminas A, B6, C, E y K; y calcio, zinc, potasio y fósforo.
La granola: es una gran alternativa a los cereales para desayunar.
El plátano: te aporta vitamina B6 y minerales como el potasio y el magnesio.
Tanto si has dormido bien, como si no, tu cerebro y tu cuerpo necesitan una pequeña cantidad de grasas cada mañana para funcionar bien.
Aquí tienes algunos de los alimentos que contienen grasas monoinsaturadas supersanas para alimentar tu cerebro y despejar tu mente.
El aguacate: contiene vitamina K, folato para la memoria y potasio para una presión arterial correcta.
Las almendras: le aportan riboflavinas y L-carnitina al cerebro, dos alimentos que mejoran tu capacidad cognitiva.
La avena: contiene polifenoles antiinflamatorios y muchos antioxidantes, además de fibra.
El boniato: no debe tomarse crudo (¡nunca!), pero contiene pocas calorías y está cargado de nutrientes antiinflamatorios y antioxidantes.
El café: es bueno para tu cerebro porque combina antioxidantes con cafeína, que tiene una función neuroprotectora que reduce el riesgo de demencia.
El chocolate (cuanto más negro y puro, mejor): sus flavonoides favorecen la circulación sanguínea.
Las coles de Bruselas y la kale: son muy sanas y te aportan mucha energía.
Los frutos rojos: tienen muchas propiedades detox.
Los huevos: la yema es rica en colina (un nutriente que facilita la comunicación entre neuronas y mejora la memoria).
Las nueces: mejoran la actividad cerebral y la memoria.
El salmón y las sardinas: ayudan a proteger el cerebro con sus ácidos grasos omega-3.
El yogur griego: sus probióticos mejoran tu salud mental.
Es muy fácil hacer un batido de frutas, preparar unas tostadas, un café, un pequeño bocadillo, una tortilla o incluso algo menos habitual como son unos gofres de avena.
Comer sano es más fácil y rico de lo que crees.