Existen algunos tipos de azúcares no refinados con nutrientes esenciales, como vitaminas y minerales.
Así, el azúcar de caña integral aporta vitamina B, minerales y fibras solubles, mientras que el azúcar de coco aporta hierro, zinc, magnesio y vitamina C.
Aunque las cantidades de estos nutrientes no son muy elevadas sí que son más saludables que los endulzantes nombrados anteriormente porque ambos tienen un índice glucémico de 35, que es la mitad del que contiene el azúcar blanco.
Puré de fruta
Algunas frutas como el plátano, la manzana y los dátiles tienen una gran capacidad para endulzar y dejar, además, un aroma muy interesante en nuestros postres.
Simplemente tenemos que batir la fruta madura con una batidora y usar la pasta como sustituto del azúcar.
Sirope de ágave
Se trata de un jarabe que se obtiene de un cactus, el agave azul, con el que también se elabora el tequila.
Tiene gran cantidad de fibra y un índice glucémico bajo, de 15 a 20 (frente a los 100 de la glucosa, los 75 del azúcar y los 78 de la miel), por lo que puede servir en cantidades moderadas para personas con diabetes.
Tiene el doble de capacidad endulzante que el azúcar blanco, así que solo deberías usar la mitad de cantidad en tus recetas.
Stevia
La stevia es una planta natural que lleva usándose desde hace siglos por los indios guaraníes.
Es 300 veces más dulce que el azúcar y, sin embargo, su índice glucémico es cero.
Es la alternativa más saludable de todas y es apta para diabéticos.
Su único inconveniente es que tiene un aroma a regaliz que puede no combinar bien con algunas recetas.