Para disfrutar del Tequila 1800 Añejo en su máxima expresión, se recomienda servirlo solo, a temperatura ambiente.
La mejor opción es usar un vaso “snifter” o “tulipán”, que concentra los aromas y permite una apreciación completa.
Tómalo en pequeños sorbos, permitiendo que sus complejas notas de vainilla, roble, nuez y caramelo se desplieguen en tu paladar.
Antes de beber, inhala suavemente para captar sus aromas más profundos.
Si prefieres una versión más suave y refrescante, el Tequila 1800 Añejo se disfruta muy bien en las rocas.
Coloca uno o dos cubos de hielo de buena calidad para que el tequila se enfríe ligeramente, lo cual suaviza los sabores y libera nuevos matices.
Aunque el Tequila 1800 Añejo se disfruta mejor solo, también es excelente para cócteles sofisticados.
Uno de los más recomendados es el Old Fashioned Mexicano, una reinterpretación de este clásico, con un toque de tequila añejo que lo hace único.
No enfríes el tequila en exceso, ya que esto podría ocultar sus complejas notas de vainilla, roble y caramelo.