En pocas cartas de los restaurantes de Sevilla falta la carrillada.
Esta receta se ha convertido en una de las reinas de las tabernas y bares de la capital hispalense.
Muchos de los comensales no quieren concluir su ratito de tapeo, almuerzo o cena sin llevarse a la boca el conocido plato sevillano.
Se trata de un menú típico de Sevilla que gusta tanto que incluso algunos de los bares más emblemáticos de la ciudad lo tienen como su opción estrella.
La misma fama que la carrillada tiene en la hostelería sevillana la tiene en las casas de la ciudad.
El menú se ha consagrado como uno de los favoritos para los vecinos de la Giralda.
Concretamente para la receta se requerirá un kilo de carrilleras de cerdo o ternera, dos cebollas grandes, dos zanahorias, tres dientes de ajo, vino tinto o Pedro Ximénez, caldo de pollo, laurel, tomillo, pimentón dulce, sal, pimienta, aceite de oliva y, como no, chocolate.
Primer paso: dorar las carrilleras a fuego fuerte.
Posteriomente, retirarlas y echar en la sartén las verduras previamente troceadas.
Segundo paso: una vez que las verduras están pochadas, es el momento de añadir las especias y el vino.
Este último se dejará evaporar.
Tercer paso: incorporar las carrilleras y dejar cocinar hasta que estas queden melosas.
Ahora es el momento de incorporar un par de onzas de chocolate.
Para quienes se decanten por echar también miel de caña o dátiles, este es el momento de hacerlo.
Cuarto paso: Por último, para aquellos que prefieran una textura más fina, se triturará la salsa.
Incorporando estos curiosos y desconocidos ingredientres, el plato quedará como si lo hubiese cocinado un auténtico experto de los fogones.
Algo que tienen comprobado muchos bares y restaurantes de la ciudad que día tras día sorprenden a sus clientes con esta deliciosa receta sevillana.