La Real Academia Española cree que la palabra gazpacho puede tener su origen del término árabe hispánico gazpáčo que, a su vez, proviene del griego gazophylakion. Un gazophylakion significaba cepillo de la iglesia y servía para introducir limosna en él, entre otros objetos. Joan Corominas y José Antonio Pascual, autores del Diccionario Crítico Etimológico, encuentran su origen en el término pre-romano caspa, que significa fragmento, haciendo alusión a los pedazos de pan y de verduras triturados con los que se elabora el gazpacho. En textos antiguos alguna vez se ha podido leer caspacho en lugar de gazpacho, lo que contribuye a que esta historia cobre fuerza frente a otras. En 1593, escribió Fr. Diego de Guadix que la palabra gazpacho significaba lechugas con hambre. Mientras que unos años después, en 1611, Sebastián Covarrubias decía Esta es comida de segadores y de gente grosera, y ellos le debieron poner el nombre como se les antojó. La Real Academia Española cree que la palabra gazpacho puede tener su origen del término árabe hispánico gazpáčo que, a su vez, proviene del griego gazophylakion. Un gazophylakion significaba cepillo de la iglesia y servía para introducir limosna en él, entre otros objetos.